Cómo mi mujer venció al cáncer de mama gracias a la braquiterapia

Joaquim tiene 80 años y vive en Buñol, en la provincia de Valencia. Está jubilado y se queda en casa con Maria Luiza. A la pareja le encanta recibir la visita de sus hijos y nietos. Por ahora, Joaquim prefiere mantenerse prudentemente optimista sobre la salud de Maria. La razón es que Maria Luiza intentó evitarle preocupaciones cuando experimentó los primeros síntomas.

Diagnóstico de cáncer de mama

Joaquim recuerda el momento en que su mujer le dijo que se había despertado con algo extraño en el pecho. Incluso después de que el examen inicial del médico no revelara ningún signo preocupante, la remitieron a Manises (Valencia) para que le hicieran una ecografía para investigar más a fondo.

Joaquim acompañó a Maria Luiza al hospital para la cita de la ecografía. El examen confirmó la presencia de un bulto de 1,5 centímetros. Durante años, Joaquim recordará el día en que su mujer demostró un coraje tan notable. Después de que los médicos recomendaran a Maria volver en un par de días para una biopsia, ella insistió en someterse al procedimiento inmediatamente.

Los resultados de la biopsia confirmaron que María tenía un tumor pequeño y no agresivo que requeriría cirugía y otros tratamientos de seguimiento.

El protocolo de tratamiento con radioterapia

Cada paciente es diferente y existen distintos métodos para tratar el cáncer de mama. El oncólogo sugerirá las opciones de tratamiento en función de factores como el tipo de cáncer o el estado de salud general de la paciente.

La esposa de Joaquim recibió el tratamiento más común; se sometió a una mastectomía parcial (que no fue de toda la mama) seguida de 16 sesiones de radioterapia con irradiación parcial acelerada de la mama.

La braquiterapia como parte del tratamiento contra el cáncer de la esposa de Joaquim

¿Qué es la braquiterapia?

El tratamiento de braquiterapia, también denominado radioterapia intervencionista, es un tipo de radioterapia que administra una dosis de radiación directamente a la zona cancerosa. A diferencia de la radiación externa, el procedimiento de braquiterapia utiliza implantes, como alambres, semillas o varillas rellenas de material radiactivo, que se insertan en el cuerpo del paciente temporalmente hasta que finaliza el tratamiento. Al colocar la fuente de radiación lo más cerca posible del lugar del tumor, la técnica minimiza la exposición a los tejidos sanos y reduce los efectos secundarios.

Este método es muy eficaz en el tratamiento de muchas formas de cáncer, como el de cuello de útero, el de próstata y el de piel.

El tratamiento con braquiterapia es una opción eficaz para tratar a los pacientes con cáncer. Si está considerando la braquiterapia como opción de tratamiento y desea obtener más información al respecto antes de hablar con sus proveedores sanitarios, encontrará una gran variedad de recursos en www.aboutbrachytherapy.com, como las preguntas más frecuentes.

Joaquim nunca había oído hablar de la braquiterapia antes de que su mujer recibiera el tratamiento en su última sesión de radioterapia.

La sesión tuvo lugar en el quirófano porque comenzó con la inserción de tres agujas a través de la piel después de que la durmieran. Los materiales radiactivos se administraron a través de esas agujas como refuerzo final de la radiación para eliminar las células cancerosas restantes.

Los beneficios de la braquiterapia en el tratamiento del cáncer

Joaquim se emociona y se enorgullece cuando cuenta que su mujer, Maria, experimentó resultados notables con su tratamiento de braquiterapia. En primer lugar, la terapia es realmente rápida y no requiere muchos viajes al hospital. María entró y salió del hospital en sólo seis horas y notificó unos efectos secundarios mínimos en comparación con otros tratamientos como la quimioterapia y la radioterapia externa. Joaquim atribuye este éxito a la capacidad de la técnica para proteger el tejido sano, lo que permite una recuperación más rápida y eficaz.

Joaquim, que luchó junto a su esposa en su batalla contra la enfermedad, quiere ofrecer consuelo a otros enfermos de cáncer. “No deben rendirse”, les insta. “Los médicos se dedican a cuidarnos y a aprender de nuestras experiencias para que al final podamos superar nuestro miedo a la enfermedad. Aunque hay casos increíblemente difíciles, debemos luchar y yo estoy aquí para ofrecerles mi aliento.”

El mayor deseo de Joaquim es conservar su maravillosa vida, pasando más años con Maria, su esposa, sus hijos y sus nietos.